viernes, 29 de abril de 2011

Hombre y mujer. ¿Quien es mejor? (Lydia Fernanda Bonilla Maldonado)

Hombre, perteneciente a la especie humana de sexo masculino sin importar su edad o apariencia,  y mujer, de la especie humana de sexo femenino, en contraste con el masculino o  varón. Ellos han sido compañeros en todo, ya sea, en el empleo, parejas, amigos, etc. Pero desde hace unos pocos años, en México, nos hemos percatado de la diferencia de progreso entre géneros. En poco tiempo se ha observado la manera en que la mujer comienza a desarrollarse pero por otro lado el hombre, quien siempre ha obtenido algunas ventajas sobre la mujer, sigue llevando una competencia con el sexo opuesto, una competencia que se hará mucho más fuerte con el paso de las décadas. La pregunta aquí es ¿Realmente es malo este progreso? ¿Es realmente una amenaza?

Años atrás, el hombre y la mujer desempeñaban diferentes roles en diferentes ámbitos de la vida cotidiana. En el hogar, la mujer era la responsable del cuidado de la casa (barrer, preparar alimentos, lavar platos, etc.) de igual manera le correspondía criar y proteger a los hijos, a diferencia del hombre que su papel solo consistía en ser el jefe y proveedor de dinero para la familia. Nadie por encima de la autoridad paterna, sin embargo, el padre tenía que demostrar ser una persona fría, sin oportunidad de dar a conocer sus sentimientos, porque podía considerarse débil y eso era malo ante los ojos de la gente.
Otro problema que se presentaba era que la madre estaba completamente sujeta a lo que el jefe de familia dijera o decidiera.  El jefe del hogar tenía  prácticamente planeada la vida que tendría.

Otro lugar en donde observábamos una gran diferencia de trato era en la educación. Antiguamente los bisabuelos solían contarte la historia de cómo las mujeres no podían estudiar por la razón de que ellas  eran las que debían aprender del mantenimiento de la casa. En cambio los varones tenían el privilegio de poder estudiar en cualquier escuela que deseasen y la carrera que quisieran. Los hombres obtenían muchos conocimientos de diferentes ciencias e infinidad de temas y las mujeres eran expertas en cuanto a cómo mantener limpia la casa.

Por ultimo, daré otro ejemplo aunque muy común aún, en cuanto el poder de expresión, Los hombre y las mujeres han tenido también una gran desigualdad en cuanto a expresar un pensamiento o sentimiento. En mi familia, a veces se hacen comentarios de lo oprimida que estaban las esposas ante el marido
- Ellas no podían decidir nada, ni siquiera cuando se embarazaban, los padres decían que se hacía con la criatura, ellos decidían si vivía o moría.
Agregare que hace unos cuantos años, la mujer no tenía el derecho de poder expresar su voto libremente.


En estos ámbitos se puede notar la diferencia en las que se desenvolvían ambos sexos. Diferentes vidas, diferentes experiencias, diferentes habilidades. Todos tenían su papel en la vida, y todo dependía de tu género: Masculino o Femenino. Si eras mujer tu vida estaba sujeta a vivir en el hogar, sin posibilidad de poder estudiar, de poder trabajar o de poder opinar. Sin embargo, el hombre tenía el derecho de estudiar, de trabajar, no convivía mucho con la familia por el trabajo, etc. Afortunadamente, la sociedad ha ido cambiando, poco a poco el rol de ambos géneros se ha ido ampliando, en cualquier lugar, en las escuelas, en la familia, incluso en la política y más.

Actualmente el hombre y la mujer son iguales ante la ley, no se le da preferencia a una mujer en cuanto comete un crimen. En procesos electorales como el de 1988, 1991 y 1994 se ha demostrado también la enorme inquietud de las mexicanas por participar políticamente y continuar defendiendo el derecho a ser tratadas sin diferencia ni discriminación alguna por el hecho de ser mujeres. En el hogar las decisiones son tomadas por el hombre y la mujer, Además  ya las mujeres tienen más libertad, ya no tienen que pedir permiso para poder salir a la esquina de su calle o para conversar con una amiga, excepto que seas el hijo o la hija que tiene que pedir permiso para salir al cine En la educación, tanto un niño como una niña puede ir a la escuela que prefiera, al ir creciendo y llegar a la Universidad puede escoger la carrera de su gusto y desempeñarla como desee, provocando una competencia equitativa entre ellos. Tanto uno como otro con las mismas oportunidades

Aun así existen grupos que comparten la idea de que los hombres son más inteligentes que su contraparte, y viceversa. Pero ya sea porque los hombres han demostrado una mayor capacidad a la hora de resolver problemas matemáticos como las mujeres han demostrado su capacidad para resolver los problemas que involucran sentimientos y que tienen una habilidad extraordinaria para poder entablar una buena conversación, ninguno tiene más importancia que el otro ambos son requeridos, ya que son uno parte de otro, incluso hablando de la creación de vida humana.

Aunque también encontramos ciertas desventajas en los avances de estas situaciones. En cuanto a poder expresar opinión, tanto el machismo como el feminismo esta en toda partes, un ejemplo muy claro es el programa de televisión que mucha gente conoce como: Laura en América, solucionando problemas de otras personas, pero solo soluciona problemas de mujeres. Dando a entender que todo hombre es infiel, acosador, y otros defectos que generaliza en ellos. Ese es un problema grave, debido a que da una idea errónea de que tanto hombres como mujeres tienen defectos que son irremediables.

Otra situación significativa es en cuanto al ámbito de la educación, en la actualmente se observa en un aula de clases de preparatoria o Universidad que la mayor parte de los alumnos corresponden a mujeres, ya que en los años pasados muchos de los alumnos varones fueron reprobando años o no desarrollaban al máximo su capacidad intelectual. Es común ser testigo, en documentales y revistas o artículos pseudopsicológicos, de supuestos experimentos que prueban la especialización del cerebro de hombres y mujeres en distintas tareas. Así, se supone que las mujeres son mejores a la hora de hablar y de resolver problemas “sentimentales” mientras que los hombres estarían biológicamente mejor preparados para resolver problemas espaciales y matemáticos. Aun asa se ha comenzado a esparcir la idea de que las mujeres tienen una mayor capacidad intelectual y mejores habilidades que los hombres, otra idea errónea.

Otra situación es la economía de una pareja o una familia puede no llegar a ser siempre favorable, así que la mujer tiene que trabajar, aunque el esposo también este trabajando, apoyo que los dos sean proveedores, así se mejora la calidad de vida de la familia o pareja. Por otro lado, surge que la mujer por querer ser igual al hombre decide entrar en el ámbito laboral y abandona por completo las obligaciones que tiene. Puede sonar un poco sexista que las mujeres tienen la obligación de cuidar a los hijos pero a pesar de ello, las mujeres tienen un lazo mucho más fuerte y cercano al que un padre u otra persona. Esto se debe al vínculo afectivo madre-hijo que se crea desde el momento de la fecundación y que va aumentando con el paso de los años.

A lo largo del tiempo han surgido algunas otras desventajas en los diferentes ámbitos pero si hay un lado negativo también debe haber un lado positivo en todo esto. Un lado que debería apreciarse y comprenderse para que el país pueda pasar al siguiente nivel, un nivel de respeto e igualdad y de progreso.

En los diferentes papeles en los que se desenvuelven quiero reconocer que no solo se ha logrado un cambio de ideas sino un cambio de actitud en el interior del país, un cambio que esperemos que poco a poco se vaya expandiendo, desde el norte hasta el sur, del este al oeste.

En la familia, se expone claramente, el hombre y la mujer, tienen funciones diferentes pero igualmente importantes y que se complementan. Sabemos que la función del padre no se limita a presidir a los integrantes de su familia, a proveer para los de su familia y protegerlos, sino que día con día, el padre puede y debe colaborar con las responsabilidades esenciales que tienen que ver con la crianza de los hijos, las que sirven para establecer lazos afectivos con ellos y que incluyen darles de comer, jugar con ellos, contarles cuentos, amarlos y todas las demás actividades que forman parte de la vida familiar. Aunque, de igual manera, la madre también comparte esa responsabilidad. En los hogares las decisiones deberían ser tomadas por ambos conyugues, no solo el padre o la madre, sino ambos. Ambos comparten ideas de diferente perspectiva pero aun así de gran importancia, ya que esas ideas se pueden complementar una con la otra, dando un resultado mucho más satisfactorio para ambos.

Desde hace un tiempo, ya podemos observar que mexicanos y mexicanas trabajan en armonía, todo para un fin en común. El desarrollo de nuestro país. Poco a poco desaparecen esas mentes inflexibles y comienzan a abrirse nuevas ideas, junto con esto se abren posibilidades para todos. Generando más trabajos y el desenvolvimiento de las habilidades de todos.

Nadie puede negar que seguimos avanzando hacia tiempos nuevos y sorprendentes, donde todo el país está participando, nadie puede negar que dentro de poco la competencia entre hombre y mujer se hará aun más fuerte de lo que es actualmente, pero esto no es para temer sino para regocijarse ya que podremos demostrar lo que somos, aumentar nuestras capacidades, dar a conocer nuestras habilidades, dar a conocer que ambos, tanto hombre como mujer, son capaces de cualquier cosa, no tienen porque limitarse, sino ampliar sus papeles en esta sociedad

Para concluir quiero decir que no importa el género que seamos, no importa que digan que el hombre es superior por su fuerza, que la mujer es más débil por su gran sensibilidad, no importa nada de lo que digan. A través de los años se ha demostrado que todos tenemos capacidades para todo, el hombre puede criar hijos al igual que una mujer, una mujer puede trabajar donde mucho hombres más trabajan, los dos pueden expresar opiniones que contienen ideas magnificas y que contribuyen con la formación de nuestro país.

No limitemos nuestras mentes a tradiciones machistas o feministas que nuestra gente ha impuesto en la antigüedad; conozcan a ambos, sus fortalezas, debilidades y sus mentalidades, y comprenderán que ambos a pesar de lo imperfectos que llegan a ser, ambos tienen la misma cantidad de oportunidades para poder llegar al éxito, el único defecto que se presenta en el camino, es nuestra sociedad, que margina cada una de nuestras  acciones, decisiones y pensamientos. Esperemos la época en nadie diga o imponga lo que cada quien tiene que hacer, pensar o sentir sino que cada quien elija lo que desee hacer. Con toda libertad. Y con todas las ganas de seguir viviendo.

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